Como parte de las novedades del pasado XX Salón del Manga de Barcelona, el 24 de octubre de 2014 llegaba a todas las libreras especializadas el esperado volumen #11 de Ataque a los Titanes (aka Shingeki no Kyojin 進撃の巨人) de mano de Norma Editorial, continuando con la historia de uno de los manga shonen / seinen más populares de la actualidad japonesa, y al fin superando el lugar donde se quedo la historia en la primera temporada anime.
Hasta ahora Shingeki no Kyojin (進撃の巨人), obra de Hajime Isayama, se publica en la revista japonesa Bessatsu Shōnen Magazine desde septiembre del 2009, cuenta con 14 tomos recopilatorios y se espera que alcance su final para el número 20.
Hace varios siglos, los humanos casi fueron aniquilados por los titanes. Los titanes son unos series enormes, sin mucha inteligencia y que devoran hombres por puro placer.
En el presente volumen encontramos lo acontecido en los capítulos 43 al 46 del manga original, dónde al fin empezamos a ver cierta luz arrojada sobre la historia que rodea a Ataque a los Titanes.
La revelación de que Reiner y Bertolt son los causante de la caída del muro María y su naturaleza como titanes y traidores a la humanidad desencadena la batalla sobre el muro. Con Reiner transformado y Eren saltando titanizado contra él, Bertolt decide tomar su forma de titán colosal (o al menos parte de ella) para hace frente a los héroes del cuerpo de Exploración.
Tras hacerse con Ymir, el titán colosal continúa atacando al cuerpo de exploración hasta que, viéndose superado, decide expulsar vapor caliente en todas direcciones, lo cual impide que puedan acercársele para rescatar a Ymir.
Mientras tanto, Eren y Reiner se enfrentan encarnizadamente fuera del muro.
Eren se lanza con toda su furia contra el titán blindado, pero la fuerza y resistencia de Reiner están muy por encima de las suyas: todo un guerrero titanizado al que sus golpes no hacen absolutamente nada... y no solo esto, si no que cualquier intento por parte de los exploradores fracasa automáticamente.
Todo su cuerpo, cubierto por placas impenetrables que parecen hechas del mismo material que la cristalización de Annie, impiden el recibir daño y potencian sus golpes de una manera abrumante.
Sin embargo, no todo esta perdido.
Tras ser herido una y otra vez, finalmente Eren, consciente de si mismo y controlando sus impulsos asesinos, comienza ha hacer uso de todos los conocimientos en artes marciales que obtuvo de la propia Annie durante su entrenamiento en el cuerpo de exploración, algo que le permite usar el poder de su rival en su contra.
El combate se recrudece cada vez más hasta que finalmente Eren logra a base de llaves reducir a Reiner... el cual decide utilizar su última baza.
Bertolt se lanza desde lo alto del muro sobre su compañero como un meteorito, generanod una explosión que siembra el caos suficiente como para desaparecer con Eren e Ymir.
¿Qué buscan Reiner y Bertolt de Eren e Ymir?
¿Podrán Mikasa, Armin y los demás recuperar a Eren?
Isayama sigue dejándonos totalmente aturdidos con el desarrollo de su historia, que cada vez se complica más y se encauza por unos caminos que ni sospechábamos. Con los desarrollos de este volumen nos encontramos ante varias nuevas teorías y detalles sobre los titanes, sus habilidades y su origen... que solo hacen que nos creemos una mayor paranoia.
Su habilidad con el dibujo sigue siendo horrorosa, y aunque se notan algunas mejoras en el trazo desde que la colección empezó, sigue sin salvarse de la hoguera. Las escenas de acción poco a poco se entienden mejor, y aunque la historia nos absorbe, sigue sin ser excusa de un arte que nos hace sangrar las retinas.
Ahora solo nos queda esperar al siguiente tomo, con esperanza de que la historia nos desvele algún nuevo detalle, por que de momento... ¡Nos tiene locos!
Hasta ahora Shingeki no Kyojin (進撃の巨人), obra de Hajime Isayama, se publica en la revista japonesa Bessatsu Shōnen Magazine desde septiembre del 2009, cuenta con 14 tomos recopilatorios y se espera que alcance su final para el número 20.
Hace varios siglos, los humanos casi fueron aniquilados por los titanes. Los titanes son unos series enormes, sin mucha inteligencia y que devoran hombres por puro placer.
A pesar de ello, un grupo reducido de humanos pudo sobrevivir en una ciudad protegida tras altos muros como defensa frente a los titanes.
Ahora, en la actualidad, hace más de 100 años que nadie ve a un titán. Elen y su hermana adoptiva Mikasa son testigos de algo terrorífico: un super-titán ha aparecido frenta a la ciudad y está destruyendo sus muros, consiguiendo que otros titanes entren en la ciudad y empiecen a matar humanos de nuevo...
Si no estáis al día con el manga, ¡recordad que podéis llevaros algún Spoilers! si continuáis a partir de aquí... ¡avisados quedáis!Ahora, en la actualidad, hace más de 100 años que nadie ve a un titán. Elen y su hermana adoptiva Mikasa son testigos de algo terrorífico: un super-titán ha aparecido frenta a la ciudad y está destruyendo sus muros, consiguiendo que otros titanes entren en la ciudad y empiecen a matar humanos de nuevo...
En el presente volumen encontramos lo acontecido en los capítulos 43 al 46 del manga original, dónde al fin empezamos a ver cierta luz arrojada sobre la historia que rodea a Ataque a los Titanes.
La revelación de que Reiner y Bertolt son los causante de la caída del muro María y su naturaleza como titanes y traidores a la humanidad desencadena la batalla sobre el muro. Con Reiner transformado y Eren saltando titanizado contra él, Bertolt decide tomar su forma de titán colosal (o al menos parte de ella) para hace frente a los héroes del cuerpo de Exploración.
Tras hacerse con Ymir, el titán colosal continúa atacando al cuerpo de exploración hasta que, viéndose superado, decide expulsar vapor caliente en todas direcciones, lo cual impide que puedan acercársele para rescatar a Ymir.
Mientras tanto, Eren y Reiner se enfrentan encarnizadamente fuera del muro.
Eren se lanza con toda su furia contra el titán blindado, pero la fuerza y resistencia de Reiner están muy por encima de las suyas: todo un guerrero titanizado al que sus golpes no hacen absolutamente nada... y no solo esto, si no que cualquier intento por parte de los exploradores fracasa automáticamente.
Todo su cuerpo, cubierto por placas impenetrables que parecen hechas del mismo material que la cristalización de Annie, impiden el recibir daño y potencian sus golpes de una manera abrumante.
Sin embargo, no todo esta perdido.
Tras ser herido una y otra vez, finalmente Eren, consciente de si mismo y controlando sus impulsos asesinos, comienza ha hacer uso de todos los conocimientos en artes marciales que obtuvo de la propia Annie durante su entrenamiento en el cuerpo de exploración, algo que le permite usar el poder de su rival en su contra.
El combate se recrudece cada vez más hasta que finalmente Eren logra a base de llaves reducir a Reiner... el cual decide utilizar su última baza.
Bertolt se lanza desde lo alto del muro sobre su compañero como un meteorito, generanod una explosión que siembra el caos suficiente como para desaparecer con Eren e Ymir.
¿Qué buscan Reiner y Bertolt de Eren e Ymir?
¿Podrán Mikasa, Armin y los demás recuperar a Eren?
Isayama sigue dejándonos totalmente aturdidos con el desarrollo de su historia, que cada vez se complica más y se encauza por unos caminos que ni sospechábamos. Con los desarrollos de este volumen nos encontramos ante varias nuevas teorías y detalles sobre los titanes, sus habilidades y su origen... que solo hacen que nos creemos una mayor paranoia.
Su habilidad con el dibujo sigue siendo horrorosa, y aunque se notan algunas mejoras en el trazo desde que la colección empezó, sigue sin salvarse de la hoguera. Las escenas de acción poco a poco se entienden mejor, y aunque la historia nos absorbe, sigue sin ser excusa de un arte que nos hace sangrar las retinas.
Ahora solo nos queda esperar al siguiente tomo, con esperanza de que la historia nos desvele algún nuevo detalle, por que de momento... ¡Nos tiene locos!