Cómic: review de EKHÖ Mundo Espejo #1 · Nueva York · [Norma Editorial].

Norma nos trae este primer número en una edición idéntica a la original; un cartoné de 52 páginas a todo color... ¡Y vaya color!
Solo hay que echar un ojo a su vistosa portada para hacernos una idea de lo que nos espera en sus páginas... 

y es que EKHÖ rompe con todos esos cómics de colores apagados y fríos para hacer gala de tonos cálidos por doquier en unas páginas que parecen un eterno atardecer repleto de imaginativos diseños y diversión por los cuatro costados.

Pero recapitulemos un poco...

La historia nos presenta a la explosiva Fourmille Gratule, una parisina que viaja a la gran manzana cuando de repente en mitad de su vuelo se apareceuna extraña criatura, mitad ardilla mitad portavoz nobiliario, que se hace llamar Sigisbert de Motafiume. Nuestro pequeño y peludo amigo anuncia a Fourmille que ha sido heredera de los vienes de su tía Odelalie... la cual supuestamente lleva veinte años muerta.

Totalmente confusa, nuestra protagonista decide aceptar la herencia, desconocedora de que esto disparara una cadena de eventos que cambiarán para siempre su vida.

De repente, el vuelo comienza a agitarse y Fourmille se agarra a su compañero de asiento... solo para terminar aterrizando en una ciudad de Nueva York muy diferente de lo esperado.

Fourmille y Yuri Podrov, el pobre y desconocido desdichado al que ella se aferró, han sido transportados a mundo espejo, donde el Nueva York que todos conocemos se presenta totalmente diferente de lo habitual, como si un cúmulo de fantasías lo hubieran transformado en una versión deformada de si mismo, repleto de seres peludos y bestias mitológicas.

Aquí el metro es una parodia del mismo, tirado por una suerte de cienpies gigantes. Los aviones son dragones con una mochilla repleta de pasajeros en su tripa, y el orden depende de esos seres peluditos mitad ardilla llamados preshauns, que tienen una extraña (pero justificada) adicción al té.

Atrapados en este mundo, la extraña pareja se verá forzada a conocerse y soportarse, a medida que tratan de acostumbrarse a lo que les rodea.

Por su parte, Fourmille se verá siendo heredera de una agencia de talentos fundada por su tía, lo cual la llevará a codearse con cabareteras y stripers de todo tipo... otro aliciente más en el que el arte de Barbucci despunta con sus mujeres contorneadas con gracia y picardía y con algún leve toque de erotismo aquí y allá que solo dotan a EKHÖ de aun más diversión.

Barbucci y Arleston llenan las páginas de esta obra de imaginación desbordante, con la fantasía por bandera y un enfoque que recuerda a las películas de este género de los ochenta, donde el sentido del humor y los personajes carismáticos ganan al lector en poco tiempo.

Y es en este ambiente en que el electrizante dibujo de Barbucci, con un definidio estilo francés, destaca en cada trazo. Montones de bichitos adorables, estructuras imposibles y gargantuescas barriadas mitológicas se van intercalando entre estas viñetas repletas de sabor, donde la habilidad del autor por diseñar atrayentes y sensuales chicas repletas de curvas, morritos y miradas complices.

Todo un carnaval multicolor que se desata a lo largo de este primer volumen repleto de aventuras, dejándonos con ganas de que la segunda entrega aterrice cuanto antes en nuestro país para seguir disfrutando del buen y desenfadado cómic de EKHÖ.