Wargames: review de "Super Dungeon Explore" parte 1 - contenido de la caja [Soda Pop Miniatures].

Nuestra aventura comenzará con el unboxing del producto y el montaje de sus miniaturas para poder empezar a jugar. Pero antes, pongámonos un poco en materia.

Soda Pop nos trae con Super Dungeon Explore un juego de mesa de exploración de mazmorras, con el principal atractivo de su ambientación y diseños tipo RPG japonés.

Su sistema nos invita a juntarnos dos o más jugadores, adoptar el papel de un héroe o un villanochibis, personalizarlos y lanzarnos a las batallas tácticas que vamos a encontrar en las mazmorras cambiantes, en busca de tesoros o derrotar a vuestro rival de la forma más divertida posible.

El juego nos ofrece la posibilidad de elegir y customizar ocho héroes a los que encarnar o bien tomar las riendas con tu señor oscuro y sus hordas, además de coleccionar montones de miniaturas adorables al más puro estilo videojuego de 8 bits, para convertir nuestras aventuras en la mazmorra en algo inolvidable.

La caja de Super Dungeon Explore es una de las más completas que nos hemos echado a la cara - ¡viene atestada de cosas!

Al abrirla encontramos lo siguiente:

- 16 dados (muy cucos) entre los que diferenciamos 8 azules, 6 rojos y 2 verdes.
- 6 tableros de Mazmorra de doble cara.
- 1 indicador de Inicio de los Héroes, 1 de Botín,  y 1 de Poder.
- 1 medidor de Aventura.
- 5 contadores de Calavera, 35 de Herida, 13 de poción, 144 de Estado.
- 10 contadores de Efecto de Héroe / Cónsul de doble cara.
- 9 cartas de Héroe, 19 cartas de Monstruo, 2 de Efecto.

Vaya locura... no nos podemos quejar de contenido, ¡desde luego!


Estamos enamorados de los dados de Super Dungeon Explorer. ¿Qué queréis que os diga? Son tan cucos que cada vez que jugamos tengo que golpearle en la mano a alguien para que no se los coma creyendo que son caramelos.

Avisados quedáis.

Volviendo al tema, podemos encontrar tres tipos de dados en el juego, siendo los azules lo más malos, los rojos los medios y los verdes los mejores, si los cataregorizamos en el resultado que pueden ofrecernos en nuestras tiradas. Es decir, si vuestro héroe puede tirar dados rojos, ¡mejor!
Pero como pueda tirar uno verde, ya es la leche el tío.

Los dados también muestran, además de sus resultados de éxito, unos dibujos de corazones o pociones, que básicamente nos permiten sacarnos un extra de alguna tirada exitosa.



En el juego también encontraremos además de los dados una serie de marcadores redondos troquelados, así como cartas en las que podremos ver los perfiles de todas las miniaturas del juego. Tanto las miniaturas como las cartas han sido diseñadas siguiendo el estandar anime chibi de los juegos RPG de 8 bits, así que además de prácticas son bonitas.

Con los marcadores podremos señalar en las cartas de minion o héroe estados como fuego, aturdido o ahogado, que penalizarán a los mismos durante el juego, y nos servirán de recordatorio de estas condiciones.  Así mismo, nos servirán para poder contar los puntos de vida que nos quedan, las pociones que llevamos encima y para poder ver en el tablero de juego en que punto se encuentra nuestra partida.

Las cartas definirán la fuerza y resistencia de las miniaturas, así como el resto de sus atributos y habilidades, su capacidad de movimiento y de acción y los dados que deberemos lanzar (y de que color) cada vez que queramos llevar a cabo una acción.

Los detalles en estos elementos son un no parar, para que os hagáis una idea, en las cartas el número de casillas de movimiento y de acciones de cada personaje quedan señaladas en un icono de un pad y un botón de mando de consola... Me da tanta morriña que me dan ganas de correr a poner mi Secret of Mana en la Super Nintendo y echarme unos vicios.




En la caja encontramos seis tableros de mazmorra de doble cara y un medidor de aventura. Los tableros de mazmorra tienen doble cara, así que nos ofrecen 12 escenarios diferentes con los que configurar nuestra dungeon, así que es complicado repetirse.

El medidor de aventura sirve como una especie de "temporizador" que sigue el curso de la partida, anunciando cuando deben salir enemigos más fuertes o los bosses, así como cuando los aventureros obtienen equipo de sus enemigos.

Con estas piezas y las antes mencionadas, ya podemos desplegar nuestra mesa de juego, a la espera de las miniaturas.

Super Dungeon Explore incluye en su caja básica la friolera de 54 miniaturas entre buenos, malos y objetos del juego ¡casi nada!
Estas miniaturas por supuesto vienen sin pintar ni montar, creadas por inyección en plástico de diferentes colores que nos permitirá saber quienes son los buenos y quienes lo malos aunque seamos unos perezosos que no tenemos ganas de pintar. Próximamente os mostraremos un paso a paso de como pintamos estas miniaturas.

El ensamblaje de estas miniaturas es realmente muy sencillo, ya que mayormente se componen de menos de cinco piezas que encajan perfectamente incluso sin pegamento (aun así, sugerimos lo utilicéis si no queréis perder nada).

Las miniaturas que vamos a encontrar dentro son la delicia de todos los otakus; montones de chibis adorables a dividir entre héroes, malos y bosses del juego, a cual más amoroso.

Las miniaturas son bastante detalladas y han sido esculpidas para representar fielmente a aquellos RPG de nuestra infancia en los que perdimos horas y horas: diseños anime con cabezas grandes, ojos enormes y mucha epicidad.


La mejor parte se la llevan los héroes, siendo sus 9 miniaturas (correspondientes a 8 héroes y la transformación de uno de ellos) las más bonitas de toda la caja y las que tienen los diseños más increibles - un trabajo digno de mención en estos guerreros achuchables.


En segundo termino pero no por ello menos importante, tenemos 32 miniaturas para representar a todos esos pequeños minions que bajo las órdenes del señor oscuro trataran de impedir la victoria de los héroes, divididos entre 22 Kobolds y 8 miniaturas de dragoncillos. Estas miniaturas son supercucas (los dragones son preciosos), pero es difícil igualar a los héroes.
Finalmente tenemos a los dos ogros kobold y a Starfire, los boses de la caja. Lo sorprendente es el enorme tamaño de estas miniaturas, bastante más grandes que las demás... ¡que son los bosses! ¡Temedles!


Aparte de estas miniaturas, que veremos en mayor profundidad en la segunda parte de nuestra review de Super Dungeon Explorer, encontramos 5 miniaturas de Cofre del Tesoro, 5 miniaturas de Punto de aparición (o spawneo, como diriamos los gamers).
Los cofres son muy resultones, así como los puntos de aparición, pero lo mejor son los cofres malvados... por que sí, de los cofres de nuestra aventura también pueden salir enemigos... ¡Los propios cofres!


En definitiva, todos aquellos que empleamos buena parte de nuestra infancia (o toda) en RPGs japoneses en nuestras consolas de 8 y 16 bits, encontraremos en Super Dungeon Explorer una serie de detalles que nos harán saltar la lagrimilla... ¡Todo un homenaje que se escapa a vuestras mesas de juego!


No os perdáis nuestro siguiente artículo, en el que veremos en profundidad las miniaturas de Super Dungeon Explorer y les daremos color para nuestras partidas... ¡En breve en Akihabara Station 秋葉原駅!